Las calles estaban mojadas y el tiempo no dejaba claro si iba a llover o no. Nos concentrábamos solos. Todo esto nos rondaba por la cabeza temiendo que la convocatoria fuera un fiasco. Pero daba igual, estábamos animadas. Llevábamos varias semanas de planificación y trabajo en el local que habían parido comunicados, carteles, banderones y sobre todo una actuación principal «Desmontando la patronal».
La jornada comenzó a las 11:00. Lenta, pero soleada. Los compañeros y compañeras que se acercaban se hacían con una bandera y la distancia de seguridad nos permitía abarcar más espacio. Toño y Esther montaron el equipo de su productora dando al evento muchísimo más empaque (gracias compañero). Poco a poco, la música y las consignas atrajeron a algunas personas que sólo pasaban por allí, junto a otras personas afines al movimiento libertario.
A las 12:00 leímos comunicados desde las diferentes secretarías, dando mensajes llenos de memoria pero con una carga de actualidad. Se habló de feminismo, de reivindicación del 1 de mayo como jornada de lucha, de la necesidad de diversidad dentro del sindicato y sobre todo, del enorme trabajo que se está haciendo, y del que queremos realizar en clave sindical y revolucionaria.
Hacia las 12:30 comenzamos con «Desmontando la patronal», una obra de teatro nacida de las compañeras y compañeros del sindicato. En esta obra íbamos viendo la evolución de la implicación en el sindicato de un personaje ficticio a través de cuestiones que nos son conocidas. A medida que el personaje iba implicándose más y más, iba desmontando literalmente a «Patricio», un pelele que representaba a su jefe directo y la patronal. Cada vez que una parte de Patricio caía, un bloque dentro de los valores anarcosindicalistas se cimentaba (compromiso, memoria, solidaridad, cultura, feminismo, acción sindical y acción directa). Estos bloques iban formando dos columnas que culminaban con un dintel donde se leían las palabras «APOYO MUTUO», mientras ya no quedaba nada de la patronal. A pesar de la lluvia la obra salió y la gente se quedó para disfrutarla.
Finalizamos con un micro abierto, que comenzó con Jaime, otro de nuestros compañeros cantando «A la huelga», «A las barricadas» y «Gallo rojo, gallo negro», seguido de Esther y Clara que recitaron los poemas «Himno de Mujeres Libres» de Lucía Sanchez Saornil y «Todavía» de Gloria Fuertes. Con todo esto, salió de nuevo el sol, pero es más poético decir, que nosotras trajimos la tormenta.
A todas las personas implicadas, gracias.
A las que se acercaron, a las que actuaron, a las que pusieron recursos, a todas gracias.
Seguimos trabajando todos los miércoles y viernes de 18:00-20:00.