Cientos de compañeras y compañeros de la CNT de toda Andalucía marcharon el sábado 12 de septiembre por las calles de la localidad sevillana de Tomares para protestar contra los daños que toda la clase obrera está sufriendo por la crisis del capital, y contra la política caciquil que la empresa Cespa – Ferrovial, concesionaria del servicio de limpieza pública, está causando sobre la plantilla de trabajadores de Tomares, en la que se está sufriendo pérdida de derechos laborales, despidos ejemplarizantes y amenazas.
Según afirma el Sindicato de Servicios Públicos de la CNT sevillana, el gobierno de la localidad de Tomares es cómplice directo de esta política, al permitir toda clase de desmanes sobre su servicio de limpieza. En el transcurso de la manifestación, la secretaria general de la Federación Local de Sindicatos de Sevilla y el Secretario de Acción Sindical de la Regional Andaluza se dirigieron a toda la militancia, para hacer patente la postura de la central anarcosindicalista sobre las consecuencias que la avaricia del capital y la dejadez del estado han provocado entre la clase trabajadora, único sustento real de la sociedad.
La manifestación, que se inició a las puertas del Ayuntamiento comenzó una vez se pudo sortear las presiones constantes de la policía. CNT recuerda que el ayuntamiento negó la celebración de la comida confederal en la localidad con la excusa de que era probable que los militantes de éste sindicato generasen disturbios y alteración del orden público.
Una vez terminada la manifestación, 150 compañeros y compañeras se dirigieron a la localidad contigua de San Juan de Aznalfarche, donde se celebró una comida de confraternización entre la militancia asistente de todos los lugares de Andalucía, que se alargó hasta el anochecer.